Tener claridad de lo que quieres es como tener un mapa para tu vida. Proporciona foco y propósito, ayudándote a tomar decisiones y emprender acciones que estén alineadas con tus objetivos.
Cómo crear el tuyo
- Clarifica tu visión: Tómate el tiempo para definir tus metas y deseos. Escríbelos primero en una hoja y ponle un titulo a cada uno. Luego, describe cada uno (explícalos). Debe ser entendible para cualquiera.
- Filtra esas metas dejando las 8 más importantes: El plan debe ser acotado. Pueden ser inclusive mucho menos.
- Busca las imágenes: Recopila imágenes y objetos que representen tu visión. Puedes hacerlo con revistas, pero lo mejor para lograr precisión es buscarlas en internet (Pinterest es una buena fuente).
- Organízalas: Organiza las imágenes en una cartulina, cuaderno o incluso en formato digital, de una manera que te parezca atractiva visualmente. No pongas más de 2 ó 3 imágenes sobre un mismo tema (no satures).
- La ubicación es clave: Es importante que pongas tu tablero en un lugar donde NO LO VEAS con frecuencia. Esto es lo contrario de lo que te han enseñado antes. Míralo por un buen rato después de terminado y luego colócalo en un lugar donde esté bien y no sea visto por nadie. Tú puedes volver a mirarlo cada seis meses si quieres, pero no es necesario, él ya está actuando.
- Entrégalo: Una vez que esté listo, entrégalo a La Fuente. (Puedes leer el post del 23 de Mayo del 2022 para saber cómo hacerlo). Este paso es indispensable y hace la gran diferencia.
Algunas claves
- Preciso es mejor: Trata de que las imágenes que eliges sean lo más cercanas posible a lo que realmente deseas. Cada detalle cuenta, ya que te ayudará a crearlo con más facilidad.
- No ahogues: Hay una diferencia entre querer y necesitar o desear desesperadamente. La expectativa ahoga los procesos y no permite que sucedan. Una vez entregado, confía en que sucederá lo mejor para ti y suéltalo como si ya hubiera ocurrido.
- Resultados a largo plazo: El proceso de manifestación es lento. Lo que desees no necesariamente aparecerá pronto, sino cuando es mejor para ti. Es indispensable hacerlo y SOLTARLO. No pensar más en él.
- La sanación de árbol acelera: Al sanar el árbol, el proceso de manifestación se hace magníficamente más rápido ya que liberas cargas que impiden que llegue eso que deseas.
- A los 5 años: Revísalo en detalle y evalúa lo sucedido. Puedes hacer alguna actualización o hacer uno nuevo.
- No hables de él con nadie, nunca: Es algo totalmente personal y único que no debe ser visto. Es tu gran secreto de luz.
- No se da, no es: Debes entender claramente que si no se dan temas, o no es el momento, no es la forma o simplemente, no es bueno para ti. Siéntete aliviada/o y agradecida/o si un tema no se da luego de 5 años, suéltalo y sólo avanza.
Conclusión
¿Es algo clave hacer uno?
Pienso que no es totalmente indispensable tener uno, pero creo que sí ayuda a manifestar en el tiempo.
Lo clave es sanar y liberar para avanzar. Eso sí es indispensable.